II Clínic Lugosala
(A raíz del primer clínic escribíamos esto)
De agradecer por el deporte...
Por suerte hace ya bastantes años que conozco al grupo de amigos que ahora forma Lugosala, a Diego, Xabi, Pereira y cía... Nos enfrentábamos en base Santiago-Lugo, Lobelle-Prone y fraguamos amistad de todas las veces que coincidimos en pabellones, clínics y congresos. Hace muchos años que caminan juntos, que crecen y que se desviven por un deporte que les habrá dado mucho, pero con el que también han sufrido bastante. Cada vez que me paso por Lugo o cada vez que nos juntamos donde haya alguna "futsal-excusa" disponible, nos tratan como uno más, hacemos piña gallego-torrejonera con los que de aquí vamos ahora y da gusto. Sobra decir, porque Diego lo ha demostrado y unifica criterios, que son buenísimos entrenadores, pero de verdad que son mejor gente aún.
Lo de este sábado ha sido increible, han organizado un clínic arriesgando mucho, con una apuesta tremenda trayendo a Marc Carmona, a Pato y a Santi. Digo arriesgando porque en las previsiones más optimistas seguramente contaban con perder dinero, tened en cuenta cachés, desplazamientos, hoteles,...en Madrid lo tenemos mucho más fácil, pero les daba lo mismo porque lo que querían era sumarnos a todos, apostar por el fútbol sala y de verdad lo hicieron. Que pensasen en mí para ayudarlos con una ponencia fue un orgullo tremendo, compartir tal cartel y la experiencia que hemos pasado...¡no hay como tener amigos! Hubiésemos estado y estaremos igual el año que viene ayudando en el rol que haga falta, en lo que necesiten porque lo merecen.
Llevamos ya bastantes años yendo a clinics y creo que el nivel de organización y de las ponencias de éste fue tremendo, sé que se han volcado y se ha notado. Atentos a todos los detalles, comida, regalos, etc y todos los asistentes con la sensación de un trato exquisito. El que nos dieron a nosotros fue de doce.
Al final, tantos años al pie del cañón, en la élite o cerca de ella, pero siempre en contacto con la base, dándoles siempre igual si hablaban con un "entrenador top" o con uno de benjamines, con buena cara con todo el mundo en Galicia, tuvo su reconomiento en ochenta entrenadores en Lugo, se dice pronto, pero es algo increíble. Juntar ese número en nuestro deporte es casi imposible, por experiencia lo sabemos, pero hacerlo en la primera edición es tremendo. Uno siempre está orgulloso de los amigos y seguramente no seamos objetivos, pero estos acaban con los calificativos y todo lo bueno que les está pasando ahora está más que sembrado. Nosotros se lo agredecemos, pero el que se lo tiene que agradecer es el fútbol sala en general. Ejemplo.
¡Gracias tíos!